La madre de Ricky (Mario Casas) acaba de salir de la cárcel. El joven lleva años relacionándose con gente de todo tipo por su vida en la calle y eso hace que tenga el proyecto en la cabeza de montar un club de alterne para que su madre sea la jefa y así deje de practicar la prostitución directamente, el "Hiroshima Club".
Pero la cosa no está nada fácil y tendrá que enfrentarse a múltiples obstáculos hasta poder conseguirlo. Contará con la ayuda de un chulo, un matón y un travesti para lograrlo.